jueves, 18 de agosto de 2011

Capitulo 5:Tercer día.Tarde.

-¡Ainoa!¡Mama no deja de llamarme!¡Tenemos que bajar a comer ya!-me grita Diana.
-¡Ya voy!-grito.
Voy hacia la puerta donde Diana me está esperando.
-Teresa y Cristina se han ido ya.
-Vale.
-Por cierto, si mamá te pregunta, te has ido de compras.
-Vale.
Salimos de la habitación y bajamos en ascensor. Nos dirigimos hacia el comedor cuando me choco con una chica.
-Lo siento.-digo.
-No es nada.-dice la chica.
La miro la cara.
-Mi-miranda-digo tartamudeando.
-Vaya...¿Cómo sabes mi nombre?-dice sorprendida.
-Tu...tu primo...es...bueno...él y yo...
-¡Oh!Tú...tú debes de ser Ainoa, sí.
-Sí, soy...Ainoa.
-Encantada de conocerte.
-Igualmente.
Nos despedimos bastante cortadas y Diana y yo vamos al comedor.
-¿Quien era esa?-me susurra
-La prima de Javier.
-¿Y de que la conoces?
-Una larga historia-termino y enseguida dibujo una sonrisa totalmente falsa en mi cara.-Hola.
Diana hace lo mismo ya que acabamos de llegar a la mesa donde están mis padres y estában mirándonos con cara rara.
-¿Qué tal de compras?-me pregunta mi madre.
Se lo ha creido.¿Se lo ha creido?.
-Bien...-como siempre miento fatal.-He ido por distintas calles y he conseguido llegar al centro pero luego al volver me he perdido y por eso he llegado más tarde.
Asiente.Diana y yo nos vamos a por la comida. Cojo paella, bastante ya que me encanta, y también cojo un poco de pasta ya que también me encanta.Voy hablando con Diana mientras vamos hacia la mesa donde está nuestra familia, cuando veo a Javier mirándome. En mi cara se dibuja una sonrisa tonta. Me resbalo con algo del suelo y me caigo hacia atrás llevandome conmigo a otra persona que estaba detrás mio y tirándo la comida hacia atrás. Maldigo en voz baja. Me levanto con la ayuda de Diana quien no puede evitar taparse un poco para que no se queden con su cara. Ayudo a levantarse a la chica a la que he tirado. Veo que es Amanda.
-Lo siento muchísimo, me he resbalado y...lo siento mucho enserio.-digo roja como un tomate.
-¡Ainoa!Vaya...no...no es nada...iba detrás de ti y en realidad quería darte un susto y mira por donde te resbalas y te caes encima de mi, osea que ha sido solo culpa mia, enserio.-dice sonriente.
Nos reimos.
-Creo que ha tenido más culpa el suelo resbaladizo-digo riendo.
-Tranquila estoy acostumbrada, soy sumamente torpe.
-Yo tambien soy como tú, pero no es que seamos torpes es que detectamos cuando el suelo necesita un abrazo.
-Me gusta, utilizare eso más a menudo.
Veo que parte de mi comida a caido en su pelo y ropa.
-¡Ohdiosmio!, tu pelo y tu ropa, lo siento-digo intentando sacudirla la ropa.
-No te preocupes, también me pasa mucho.
Se rie. Me doy cuenta también de que el plato se ha roto y hay más comida en el suelo. En seguida sale un camarero.
-¿Que ha pasado aqui?-dice mirando el espectaculo.
-Es que...me he resbalado y ella estaba detrás y la he tirado, y también he tirado la comida al suelo por la caida. Lo siento-digo poniendome otra vez roja como un tomate.
-No pasa nada, pero ten más cuidado la próxima vez.
Las dos asentimos. Vuelvo a coger otro plato con paella y pasta.
-Ainoa-me llama Amanda.-¿Que te parece si esta noche vienes conmigo a una fiesta en la playa?-dudo-Bueno es que un chico me ha invitado esta mañana y no conozco a nadie y como me caes muy bien pues me gustaria que vinieras.
-Suponiendo que te he tirado la comida encima y he caido encima de ti creo que aceptaré-digo burlona.
-Muy bien-dice burlona-La fiesta empieza creo que a las 23:30 asique te paso a buscar por tu habitación a las 23:15.-hace una pausa-¿Numero de habitación?
-823.
-¡Que casualidad!¡Mi habitación es la 822!
-Genial, así no tendrás que andar mucho.
-Exacto.
-Bueno pues hasta luego-se despide.
-Hasta luego.
Nos despedimos con dos besos en las mejillas Diana ya se ha ido a la mesa y al parecer todos me están esperando. Me siento en la mesa y comenzamos a comer. Luego vamos a por el segundo plato y finalmente a por el postre. Diana, Cristina y yo decidimos que después de comer vamos a ir a la piscina, asique Teresa se queda en la habitación de mis padres.
Subimos a por las cosas para la piscina y bajamos. Cogemos también la cámara. A pesar de llevar tres días no habíamos ido todavía a la piscina. La piscina tiene un enorme tobogán. Amo los toboganes en las piscinas.Mi rostro se ilumina con una sonrisa.
-¡Es enorme!-grito.
-¡Sí!-grita Diana.
Cogemos rapido tres hamacas libres y dejamos las toallas encima de ellas y las cosas a un lado. Nos quitamos la ropa quedándonos con el bikini. Cristina decide quedarse tomando el sol y haciendonos fotos. Diana y yo subimos corriendo las escaleras puesto que no hay nadie. Al llegar arriba le indicamos a Cristina que nos haga una foto. Le indicamos tambien que queremos una cuando estemos flotando antes de llegar al agua. Primero se tira Diana sentada y después de unos segundos yo, sentada también. En la piscina nos tiramos mientras Cristina nos hace fotos, También hacemos el pino y un poco el pavo. Veo que Javier acaba de salir y está en la puerta mirando hacia dentro del hotel. Me salgo de la piscina y voy hacia el sin hacer ruido. Le tapo los ojos con las manos caladas ya que voy chorreando agua de arriba a abajo. Se sorprende pero enseguida dice tocandome las manos:
-Miranda, se que eres tú.
Sonrio. Le doy la vuelta y sin destaparle los ojos le susurro al odio:
-Creo que Miranda no haría esto-veo su cara de sorpresa pero antes de que pueda hacer ni decir nada le retiro las manos y le beso enredando mis dedos en su suave pelo. Me apreto contra el todo lo que puedo para mojarle.Me retiro un poco y sonrío aún con los ojos cerrados, pero le vuelvo a besar. Nos separamos.Me mira sorprendido.
-Me has calado-dice sonriendo.
-Esa era la idea- digo remolona acercándome otra vez a él.
Me acoge en sus brazos y me vuelve a besar. Sonrio entre besos. Me besa también por toda la cara y comienzo a reirme.
-Para-digo riendo mientras le empujo.
Con la mano cogida nos quedamos mirándonos mientras sonreimos.
-Ven-digo mientras le llevo hacia donde está mi hamaca. Diana ha salido del agua y está junto a Cristina, ambas nos miran con la boca abierta. Cuando ven que nos acercamos cambian la cara, para disimular.
-Están son Cristina-la señalo-y Diana-la señalo-Dos de mis hermanas.
-Encantado de conoceros-dice mientras va a darlas dos besos.
Sonrío.
-Lo mismo digo-dicen a la vez.
-Olle-dice Diana-Julio...¿Dónde está? No le veo desde el concurso de baile.
Javier saca una media sonrisa.
-Julio, me ha hablado de ti. Está con fiebre, pero podrías ir a verle, su habitación es la 947.
-Mmmm...vale.-dice con una gran sonrisa en la cara. Se viste aunque esté mojada y desaparece enseguida.
Le doy en el brazo.
-¿Qué?-dice frotándose el brazo.
Niego con la cabeza mientras sonrío. Veo que se está quitando la camiseta. Miro el tobogán, pero de repente unos brazos me cogen en brazos y Javier(supongo que es él) corre y de un salto se tira al agua conmigo cogida en brazos. Salgo del fondo de la piscina y veo que Javier sale a mi lado. Le empiezo a salpicar riéndome, pero me coge otra vez y me vuelve a meter en el fondo de la piscina. Salimos y entonces me besa.
Me separo y le salpico cuando va a intentar volver a besarme Sonrio satisfecha mientras cierra los ojos y tose.
-Serás...-dice y me coge de la cintura. Me levanta y me tira.
Salgo del agua y corro hacia el tobogán. Me sigue. Subo las escaleras corriendo y justo antes de que me consiga coger me tiro por el tobogán. Él se tira seguido. Cae unos segundos después que yo, nado hacia el bordillo y me salgo. Corro dentro del hotel. Voy mirando hacia atrás y me sigue de cerca. Me choco con un hombre que va con traje. En seguida me pongo seria y miro al hombre con el que me he chocado.
-Lo siento mucho señor, enserio, no le he visto, lo siento-digo agachando la cabeza.
Javier se sitúa a mi lado.
-Padre, lo siento.-dice Javier mirándole serio.
Miro a Javier con los ojos muy abiertos.
-¿Cuántas veces te he dicho que no se puede entrar mojado?-dice su padre.
-Muchas, lo siento, no nos dimos cuenta.
-No pasa nada-entonces me mira con interes.
-¿Quién es ella?-pregunta.
-Es...-le interrumpo.
-Me llamo Ainoa.-digo ofreciéndole mi mano. Me la estrecha.
-¿Eres la novia de mi hijo, la Ainoa de la que tamto me habla?-dice sonriendo.
Me sonrojo. Sonrío. Miro a Javier.
-Si, es ella-dice él.
-Es un placer conocerte Ainoa.-hace una pausa y se queda pensativo.-¿Qué te parece si cenamos hoy tu familia y la nuestra?
-¡Oh!...Eh...-dudo-Bueno...
-Venga, seguro que será fantástico.
-Está bien, le preguntaré a mis padres y luego se lo confirmo a su hijo.
-De acuerdo.-se despide y se va.
-¡Dios mio!-digo.
Me pongo nerviosa.
-Tranquila, todo saldrá bien.
-No.
-Sí, estoy seguro.
Me sonrie y me besa. Sonrio.


-Mamá, hoy...hoy...he quedado para que cenemos con la familia de...de...mi...no-novio...-digo tartamudeando cuando estamos en la playa, después de salir del agua.
-¿Tu novio?-me dice con tranquilidad.
-Sí
-¿Desde cuando tienes novio?
-Desde hace dos días o así.
-¿Dos días?
-Sí
-¿Y cómo es que ya vamos a cenar con su familia?
-Nos hemos encontrado a su padre y se ha empeñado.
-De acuerdo, no es mala idea.
-¿Entonces si?
Asiente. Me pongo nerviosa solo de pensar en lo que puede pasar. Genial.